Cleptomanía: El sujeto que padece cleptomanía no puede evitar el impulso de
robar objetos, independientemente del valor económico de lo que roba; sufre de
un deterioro laboral, familiar, personal y legal. Es un trastorno del control
de impulsos y se ha clasificado como una adicción psicológica. La conducta es
precedida por una ansiedad creciente que se alivia inmediatamente después de
poseer el objeto deseado, produciéndose un reforzamiento negativo. Dicho
refuerzo es una de las causas por las cuales se mantiene la conducta problema.
Mitomanía: Mitomanía, mentira patológica o pseudología fantástica son tres de
los varios términos aplicados por los psiquiatras no se nombrar el
comportamiento de los mentirosos compulsivos o habituales.